Si ya comprar una casa es una proeza increíble estos últimos años, reformarla es un verdadero quebradero de cabeza que poca gente califica como gratificante o experiencia positiva. Suele ser algo traumático, ya que, aunque creas que tienes todo bajo control, siempre, pero siempre, van a pasar imprevistos.
En este post vamos a tratar algunos de los errores más comunes que suelen acontecer, para que los tengas bajo sabido y puedas evitar o minimizar muchos de ellos, o intentarlo por lo menos.
La mayoría de presupuestos deben ceñirse a una cifra cerrada, a no ser que te sobre el dinero y no te importe en absoluto pasarte. A la hora de hacer una reforma integral debemos considerar absolutamente todo lo necesario, incluyendo las típicas cositas que pasan desapercibidas, como picaportes, pero que son imprescindibles para hacer una casa funcional.
Otro error muy habitual es empezar a aceptar pequeñas modificaciones sobre algo ya planteado, ya que seguramente lleven una cuantía económica a mayores asociada.
Va a pasar algo, seguro, por muy bien que tengas planificado todo. Los “por sí acaso pasa”, pasan de verdad. Aunque pensemos que es algo propio de los realities americanos de decoración, también van a pasar en tu reforma integral piso: desniveles del techo y del suelo, tuberías y cableado en mal estado o que se rompen accidentalmente…
Como dice el refrán, es mejor prevenir que curar, por lo que deberás considerar un 10 o 20% del presupuesto total para este tipo de cosas.
Todos queremos una casa bonita digna de Pinterest, pero debes anteponer siempre la comodidad. Vas a vivir ahí, y, a la larga, lo agradecerás. También debes invertir en todo lo que no se ve: buen sistema de calefacción, aislamiento, carpintería de buena calidad…
Esto no quiere decir que tengas que hacer fea tu casa, ojo, si no que tengas claras tus necesidades y las de donde vives. Por ejemplo, si vas a reformar piso Coruña necesitarás invertir más en aislar la casa de humedades pero menos en aire acondicionado que si vivieras en Sevilla.
Por último, el consejo más importante. Está bien que tengas las ideas claras, y cuanto más, mejor, pero siempre debes dejarte aconsejar por los profesionales. Ellos saben lo que hacen y, si te lo dicen, es por algo.
Antes de embarcarte en esta gran experiencia de tu vida, debes elegir muy bien al equipo que va a hacer tus sueños realidad. Si escoges bien, verás que tu peor pesadilla puede ser un camino de flores.